Considerando que una adecuada caracterización de los drenajes generados en las operaciones mineras permite realizar una correcta selección de su sistema de tratamiento. Es muy importante emplear las mejores técnicas disponibles (MTD) para desarrollar metodologías de caracterización y tratamiento de las aguas ácidas de mina, como la acidez total, que incluye demás de la acidez protónica la acidez mineral, a los que se acompañan ensayos de neutralización y precipitación que promueven la formación de procesos físicos y químicos que modifican las condiciones de Eh y pH de las descargas, favoreciendo la formación de especies insolubles y la remoción de la carga metálica disuelta en las aguas.
En estos ensayos de caracterización de aguas ácidas sobresalen la determinación de las zonas de hidrólisis y la formación de fases sólidas iniciales de hierro y aluminio que precipitan como hidróxidos, oxihidroxidos o hidroxisulfatos a valores de pH entre 2.7 y 6, que inducen la adsorción y coprecipitación de metales aun disueltos como zinc, cadmio, manganeso y otros. Si se continua con los ensayos a valores de pH entre 6 a 11 se continúan identificando el resto de zonas de hidrólisis de los demás constituyentes disueltos en el agua, aspecto que va unido a los rangos de pH-Eh en los que puede retirar la carga metálica presente en los efluentes.
Esta metodología de caracterización hidrogeoquímica basado en la estimación de la acidez total y la determinación de las zonas de hidrólisis permite dimensionar sistemas de tratamiento de aguas de mina más eficientes denominados directos y por etapas, que inducen a un menor consumo de reactivos y mejor control ambiental. En el caso de procesos de neutralización por etapas se va retirando secuencialmente los lodos o sólidos generados en cada etapa, a fin evitar la redisolución de las fases sólidas, potenciar la eficiencia del sistema de tratamiento y reducir los costos y el consumo de reactivos.
En este trabajo se hace un recuento de las técnicas de caracterización geoquímica de efluentes que han ayudado a desarrollar sistemas de tratamiento más eficientes y que hacen posible que las descargas a cuerpo receptor cumplan con los requerimientos legales vigentes exigibles por la legislación minero-ambiental en el caso de Perú.
